lunes, 7 de marzo de 2011

Solo falto yo!!!

  Efectivamente mi colapso mental se debía en parte a lo que ya sabemos de todos los meses y a la crisis mental que provoca el grado.

   Tuve la gran idea de ir a un asado con mis compañeras de U, que casualmente ya aprobaron el examen. Llegué en calidad de bulto como ya describí en la entrada anterior con todo el dramón existencial intentando parecer digna.

 Obviamente en un momento salió el tema que nos ha quebrado la cabeza a todas y se sinceraron, TODAS habían pasado por lo mismo que yo, el llanto sin saber el por qué, las pasadas de rollos, la ultrasensibilidad, insomnio y la derivación del estrés a otros aspectos de la vida. La colaboradora estrella del blog  también colaboró a hacerme ver que estas cosas PASAN no porque sea una mamona insufrible, hoy lo comenté con mi interrogadora la que me volvió a corroborar que es NORMAL, que es una etapa penca pero que termina pronto y sirve para crecer (pero cuesta y duele más que la xuxa).

 Sinceramente me ayudaron esas conversas, porque una intenta desahogarse con otras personas cercanas pero no es lo mismo, puede haber entendimiento pero nunca comprensión por un asunto de vivencias hay cero empatía verdadera con este asunto tan jodido emocionalmente, que solo los dementes que optamos por esto entendemos.

  Pero para están los colegas que ya han pasado por esto y lo agradezco infinitamente, ahora a seguir a full como siempre y con la frente bien en alto !!!!

2 comentarios:

Gradista por II vez dijo...

Gradista:
Canta conmigo...
Llegó la hora, de entrar al club.
Estamos todos, sólo faltas tú.
(Como la canción de Cachureos, jaja).
Sí gradista, sólo faltas tú y de seguro más temprano que tarde, entrarás al "grupo" con tu sonrisa de haber aprobado.
Personalmente, no puedo decir que la vida me haya cambiado por haber aprobado o no el examen, la vida me cambió antes. Durante el proceso, no después. Porque las lecciones se aprenden sufriendo los meses anteriores, entonces, aprobar sólo es la coronación de la madurez que una gana en el proceso, aprobar no te da tantas lecciones, es el estudio doloros y punzante el que brinda más desarrollo.
Una vez te dije, que algunos toman el examen como una prueba para demostrarse que son mejores personas. Creo que eso no es tan así, que uno desarrolla ciertas virtudes y resiliencia durante meses, no en una hora que dura el examen. Por eso, cuando te leo, veo que de verdad este proceso te ha servido ene. Y eso es genial, mira que hay gente que sigue siendo la misma mierda de persona con o sin examen de grado, jaja. Esto de "preparar el examen" es algo que sólo un estudiante de Derecho puede entender, somos un club maldito, jaja.
No te niego que aprobar rinde mucha satisfacción, felicidad, alivio, incluso "el orgullo" de haber pasado el examen. En mi caso, no hubo tanta parafernalia, más bien fue una sensación de tranquilidad general, que me llenó los huesos y el alma. No hubo griterío, ni lágrimas, ni nada muy pomposo. Sólo una paz infinita que estoy segura que muy pronto también experimentarás.
Como es sabido, también puedo hablar desde el punto de vista de la reprobación, pero no quiero referirme a eso, prefiero llenarte de energía positiva. Cualquier aporte sirve, y leer cosas tediosas de reprobar y todo ese cuento, podría "sicosearte". Me pongo el parche antes de la herida. Y no es que te esté tratando con condescendencia, ojo.
Sobre el asado, bakán. Es bueno compatibilizar el ocio y el estudio incluso en el mes final antes de rendirlo. Una película o salir un poco. Sirve para controlar la neura y no perder la cabeza.
Avísame cuando es tu fecha, a ver si te hago algunos machitunes, jaja. Mi espíritu solidario está contigo, toda la energía gradística y mis buenos deseos gradísticos te acompañan desde ya. Me siento muy comprometida con tu examen, puede leerse como una patudez, pero de verdad, tengo muchas ganas de que te vaya excelente. Confío en que así será.

P.S.: Aun me queda comentar la segunda patita de la entrada del blog anterior, no creas que me olvidé.

Nati Sch. dijo...

que difícil, pero piensa en esos días post, donde el momento ya habrá pasado

cariños